Lugo, 12 de agosto de 2020

Mosaico romano

El día anterior reservamos la entrada al Museo Provincial de Lugo, que conserva una colección arqueológica muy valiosa. Debido a las restricciones por la Covid 19, el Museo Provincial de Lugo solo ofrecía visitas guiadas y gratuitas, pero restringuidas a algunas de las salas de exposición. Una vez más me sorprendió la prohibición de tomar fotografías en varias salas, aunque fuera sin flash ni trípode, mientras está permitido en el Louvre, en el British Museum, en el Museo Arqueológico de Nápoles, en los Museos Capitolinos (excepto en la Capilla Sixtina), en la Basílica de San Pedro y tantos otros museos del mundo. Por ello, no pude fotografiar la colección de torques y otros objetos elaborados en oro que tienen expuestos en una sala especial. Entre ellos, destaca el torques de Burela, hallado por un agricultor en el Chao de Castro, Burela (Lugo), en el año 1945. Fue hecho con 1812 gramos de oro entre los siglos III y II a. C. Formaba parte de una colección de 40 piezas por la que la Diputación de Lugo pagó 2,3 millones de euros entre los años 2014 y 2018. El mosaico de 38 metros cuadrados de la fotografía, del siglo III d. C., procede de una domus de Lucus Augusti y fue encontrado en 1986 durante la excavación para la construcción de los sótanos de la actual subdelegación del gobierno de Lugo. El nombre de Lugo tiene su origen en el latino de lucus, que podemos traducir como "bosque sagrado", referido a un bosque que tenía una importancia religiosa especial para una comunidad determinada. Eran comunes a muchas culturas de la antigüedad, donde se erigían altares y pequeñas capillas y plantaban árboles que eran tan sagrados como los mismos templos.
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En el centro del mosaico se aprecian las figuras de Dédalo, Pasífae y la vaca de madera que había construido Dédalo para que la reina de Creta, Pasífae, consumase su pasión por un toro blanco del que el dios Poseidón hizo que Pasífae se enamorase. Tras satisfacer su deseo nació el Minotauro, criatura con cuerpo humano y cabeza y cola de toro. Dédalo construyó un laberinto para retenerlo.
Claustro del antiguo convento de San Francisco

Este claustro franciscano fue construido hacia el año 1452 y actualmente forma parte del Museo Provincial de Lugo y en sus soportales se hallan expuestas numerosas piezas arqueológicas.
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En los soportales del claustro se puede ver una extensa colección de restos arqueológicos.
Miliario y aras romanas

Miliario

En al fotografía, un miliario de granito de la calzada romana a su paso por Santiago de Entrambasaguas, Guntín (Lugo). Los romanos los colocaban en el borde de las calzadas romanas para señalar las distancias cada 1000 passus (dos pasos), lo que equivale a una distancia de unos 1480 metros. Solían ser de granito, con una altura de entre 2 y 4 metros de altura. La mayor parte de los miliarios llevaban inscripciones grabadas.
Ara romana

En la fotografía, una lápida funeraria que comienza con las letras D M, la abreviatura de dis manibus, "dedicado a los dioses manes". En la religión romana se creía en la inmortalidad de las almas. Los romanos creían que las almas de sus familiares podían ser beneficiosas y las llamaban manes, del adjetivo latino manis, cuyo significado es equivalente al de bonus, "buenos". Para que el espíritu de un pariente muerto entrara a formar parte de los dioses manes antes debía recibir un funeral apropiado. De no ser así, se convertiría en un fantasma que asustaría a sus familiares hasta que estos le honraran con el funeral adecuado. En el culto a los manes se le hacían ofrendas de alimentos (miel, leche, vino puro, huevos, pan) y flores en sus tumbas durante el funeral y en el aniversario de su muerte. De lo contrario, los familiares vivos sufrían pesadillas, enfermedades y desgracias.
El que esto escribe y una chuleta de ternera gallega

Grajilla occidental (Corvus monedula)

Torre A Mosqueira

De las 71 torres que se conservan de la muralla de Lugo solo una conserva restos de los dos pisos superiores con ventanas que tuvieron en época romana.
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Puerta de Santiago

Por la puerta de Santiago de la muralla de Lugo pasaba la calzada que bajaba la cuesta hasta el puente romano.
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Puente romano de Lugo

El puente romano que cruza el río Miño data del siglo I y en su origen tenía una anchura de 7 metros en lugar de los 4 actuales. Ha sufrido numerosas remodelaciones. 
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Desde el puente vimos varias especies de aves.
Carricerín común (Acrocephalus schoenobaenus)

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Andarríos chico (Actitis hypoleucos)

Garza real (Ardea cinerea)

Aviones roqueros (Ptyonoprogne rupestris)

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