En busca de la Naturaleza por el mundo: Numancia y Picos de Urbión, 22 de febrero de 2023

Vista aérea de las ruinas de Numancia

Tras desayunar, metimos las maletas en el coche y fuimos a ver las ruinas de la ciudad de Numancia, junto al pueblo de Garray, en el cerro de La Muela, a menos de 10 kilómetros de la ciudad de Soria.

Monumentos sobre las ruinas de Numancia

El monumento en primer plano, inacabado, se levantó en honor a los héroes de Numancia en 1842, desgraciadamente, sobre el caldarium de las termas romanas. En segundo plano se ve el monumento construido a expensas del senador soriano Ramón Benito Aceña, al igual que el Museo Numantino que visitamos el día anterior, e inaugurado por el rey Alfonso XIII en 1905.

Edificios y calles

El historiador y obispo Antonio de Guevara (1480-1545) identificó claramente Numancia con Garray en el siglo XVI en una carta al duque de Nájera y al arzobispo de Sevilla: "Decir que la ciudad de Çamora fué en otro tiempo Numancia es cosa fabulosa y de risa digna, porque, si las historias no nos engañan, desde que hubo Numancia en el mundo hasta que començó a ser Çamora, pasaron setecientos y treinta y tres años. Si Plinio y Pomponio, y Tholomeo, y Estrabo dixeran que Nuniancia estaba cabe Duero, hubiera dubda si era Soria o Çamora; mas dicen estos historiadores que estaba su fundación a cerca del nascimiento de Duero, de lo cual se puede coligir que pues Çamora está más de treinta leguas del nascimiento de Duero, y Soria no está más de cinco, que es Soria y no Çamora. Tres opiniones son a do puntualmente fué el sitio de la ciudad de Numancia, en que unos dicen que fué do agora es Soria; otros dicen que fué de la otra parte de la puente, en un alto; otros dicen que fué una legua de allí, en un lugar llamado Garray, y a mi parescer, y según lo que yo conoscí de los tres sitios, ésta es la mayor y la más verdadera opinión, porque allí hallan grandes antigüedades y parescen grandes edificios. Los que escribieron de Numancia fueron Plinio, Strabo, Tholomeo, Trogo Pompeo, Pullion, Trebelio, Vulpicio, Ysidoro, Justino y Marco Ancio."

Pozo o aljibe

Sin embargo, fue el ingeniero y arqueólogo Eduardo Saavedra (1829-1912) quien indicó su situación en su artículo "Descripción de la vía romana entre Uxama y Augustobriga", publicado en el volumen 9 de la revista Memorias de la Real Academia de la Historia en el año 1879, donde escribió: "La situación geográfica de Numancia queda determinada de una manera indudable, y que pocas veces es fácil conseguir, porque conociéndose dos líneas que pasan por ella, debe hallarse en el punto de su común intersección. Es una de estas líneas la vía de Caesaraugusta por la Celtiberia, según lo demuestra el Itinerario de Antonino, sin dejar duda posible; la otra es el río Duero, a cuyas orillas se encontraba, según consta en gran número de pasajes bien conocidos de antiguos geógrafos e historiadores, como Estrabón y Plinio, Lucio Floro y Apiano Alejandrino". Fue un trabajo premiado por la Real Academia de la Historia en 1861, que ya había confirmado en 1799 la ubicación de Numancia en el cerro de La Muela de Garray.

Situación de Numancia

Fue declarado Monumento Nacional el 25 de agosto de 1882, pero las excavaciones arqueológicas regulares de Numancia no comenzaron hasta el 1906.

Edificios y calles

Numancia es el nombre de una desaparecida población celtíbera de unas 8 hectáreas, situada cerca del pueblo actual de Garray. Estrabón y Ptolomeo escribieron que Numancia era de los arévacos. Estos construían sus poblados sobre cerros a los que protegían con una, dos o hasta tres murallas.

Ídem

El Senado Romano nombró cónsul en enero del 134 a. C. a Publio Cornelio Escipión Emiliano, que derrotó a los cartagineses y destruyó Cartago. Ese mismo año derrotó a los vacceos y luego asedió Numancia. Primero ordenó levantar 7 castillos y una valla con foso, y después una segunda valla también con foso y un muro de 8 pies de ancho y 10 de alto y con torres cada 30 metros de muro. A pesar de ello, Retógenes y otros 10 hombres lograron superar el cerco en la primavera del año 133 a. C. y fueron a pedir ayuda a las ciudades arévacas, pero por el temor a las represalias de los romanos, solo obtuvieron el compromiso de los jóvenes de la ciudad de Lutia, pero la Asamblea de los Mayores los delató ante Escipión, que fue hasta Lutia y ordenó cortarles la mano derecha a unos 400 jóvenes.

Reconstrucción de casa celtibérica

Ordenó levantar un muralla con foso de 9 kilómetros apoyado por torres, fosos y empalizadas. Tras 13 meses de hambruna y enfermedades, agotados sus víveres, algunos numantinos se entregaron como esclavos, mientras que la gran mayoría decidió por el suicidio. La ciudad fue repoblada y durante su excavación arqueológica se encontraron pocos restos de la ciudad celtibérica. La resistencia de sus habitantes al asedio realizado por las tropas de la República de Roma bajo las órdenes de Publio Cornelio Escipión Emiliano Africano Menor en el verano del año 133 a. C. acabó con el suicidio de la mayoría de sus pobladores y ha pasado a la historia como ejemplo de resistencia, acuñándose en la expresión "resistencia numantina".

Ídem

La musealización del yacimiento arqueológico de Numancia incluye la reconstrucción de dos viviendas, una de época celtibérica y otra de época romana. Las casas celtibéricas, de unos 50 metros cuadrados, tenían 2 estancias al principio y más tarde se le añadió una tercera. En la habitación principal cocinaban, comían y dormían, otra se empleaba como despensa y la tercera era el vestíbulo y entrada. La parte inferior de los muros de las casas eran de piedra y de adobe la superior. La techumbre estaba protegida por paja de centeno y el suelo era de tierra apisonada.

Reconstrucción de casa y muralla numantinas

Reconstrucción de muralla numantina

Reconstrucción de casa celtibérica

Interior de la reconstrucción de la casa celtibérica

Ídem

Telar

Ventana con trisquel tallado

Lanzas, escudo y cerámica

Escudo

Molinos de mano y giratorios

Plinio el Viejo en un pasaje de su Naturalis historia indica que en Hispania se consumían tres tipos de cerveza: zythium, caelia y cerea; sin indicar cuales eran sus diferencias. Lucio Aneo Floro describió en el sitio de Numancia una bebida a base de trigo denominada caelia y el historiador Paulo Orosio describió el caelia hispano como una bebida embriagante y áspera.

Trampilla para bajar a la bodega

Piedras pasaderas de la época celtibérica

Reconstrucción de casa romana

Ídem

La ciudad romana se diseñó que sus edificios cortasen el paso del viento norte, para los que las calles se orientaban en dirección este-oeste, excepto dos calles principales en dirección norte-sur. En cada cruce de calles, estas continuaban en el mismo sentido, pero con los edificios algo desplazados hacia un lado para conseguir que las esquinas de las casas cortasen el viento. Las calles estuvieron empedradas con cantos rodados.

Pozo o aljibe con escalera

Edificios y calles

Casas con patios porticados

Ídem

Pozo o aljibe

Después subimos a los Picos de Urbión y llegamos hasta el aparcamiento de la Laguna Negra, a 1700 metros de altitud, en el municipio de Vinuesa (Soria), donde dimos un paseo.